Alberto «Tito» Abecasis fue un músico de gran talento y especial aptitud para transmitir su saber, sus emociones, y quienes tuvimos la fortuna de conocerlo, gozar de su cariño y trabajar con él, tenemos siempre presente su recuerdo.
Tito era un narrador de fuste, con un humor finísimo que hacía imborrable cualquier momento compartido con él, ya sea conversando, escuchando sus historias, haciendo música, tocando el piano o cantando con su acompañamiento. Y por supuesto guitarreando luego de una comida y compartiendo la música y el vino.
Historiador, escribió mucho, entre tanto un análisis pormenorizado de cien chacareras. Avezado bailarín fue también legislador y dos veces intendente de la ciudad donde vivió, La Carlota, que acaba de honrarlo nombrando una calle con su nombre: «Prof. Alberto Abecasis«. Justo merecimiento porque en la función pública atravesó momentos difíciles del devenir de la política, ingresando a ella con un buen pasar y finalizando con una pérdida importante de ese estado. Es el único político que conocemos que finalizó su gestión más pobre que al comenzar. Dirigió y compuso y arregló obras para coros y grupos vocales, e hizo eficiente docencia en su andar.
Por eso Sosteniendo Utopías tributa su recuerdo en el programa, donde traía sus columnas sobre diversos aspectos de la música universal, siempre con el toque humorístico acompañando la seriedad de sus investigaciones. En el siguiente enlace una de sus columnas:
